Thalía admite que fue muda por un año

Thalía es muy famosa y feliz, pero también su vida ha sido trágica y dolorosa. Y eso es lo que contará la famosa estrella mexicana en el libro ‘Cada día más fuerte’, en el que revelará secretos de su vida jamás publicados.

Y es que no sólo hablará de la culpabilidad que sintió por el secuestro de sus hermanas Laura Zapata y Ernestina Sodi, así como de las terapias que debió tomar para superar ese trago amargo, también describirá el año que estuvo sin decir palabra, tras el trauma que le ocasionó la partida de su padre.

Thalia Growing Stronger

Sufrió shock de niña, cuando su padre murió

‘Hay oportunidad para sentirse bien, a pesar de una tragedia. Existe el chance de convertir o revertir la tristeza, el dolor, la soledad, el abandono, la muerte’, dijo la intérprete mexicana, quien invitó a su público a leer su obra y, como ella, convertir sus tristezas en una experiencia positiva de aprendizaje y crecimiento espiritual.

La artista, quien no quiso dar más detalles de su mudez a los seis años de edad para que lean su libro, recalcó que su vida ha sido un viaje a los dos extremos de felicidad e inmensa tristeza, y que su madre, Yolanda Miranda, antes de partir le ayudó a completar su historia.

‘Es algo muy íntimo, donde me expongo al mil, donde no hay una máscara ni un rinconcito que quede guardado’, explicó la esposa de Tommy Mottola, y agregó ‘fue como limpiar el clóset, la casa, como tirar paredes y abrir espacios nuevos, sin duda, fue muy refrescante para mi vida’.

Thalia

Además, Thalía cuenta historias escalofriantes, como el encuentro que tuvo de niña con La Llorona, a quien, incluso, le agradece el haberla hecho una mujer valiente.

‘Entre latinos conocemos exactamente quién es La Llorona. Siempre habrá ese personaje fantasmagórico en las historias de nuestras familias latinas, y realmente en nuestra casa sí existió un ser así. Incluso, en el libro hablo de que la casa estaba construida sobre un cementerio y de pronto se sentían energías sobrenaturales. Y eso a una niña, quieras o no, la hace fuerte, la hace defenderse de lo invisible, de lo que no se toca, de lo que está ahí y es importante enfrentarlo de cara.’